un fracaso bobina de encendido del coche puede generar varios problemas más allá de los simples problemas iniciales. A continuación se muestran algunos problemas comunes asociados con una bobina de encendido defectuosa:
Fallos de encendido del motor: una bobina de encendido defectuosa puede hacer que el motor falle, lo que puede provocar un funcionamiento irregular del motor, una disminución de la eficiencia del combustible y un aumento de las emisiones.
Poca economía de combustible: si la bobina de encendido no funciona correctamente, es posible que el motor no queme combustible de manera eficiente, lo que genera un mayor consumo de combustible.
Pérdida de potencia: una bobina de encendido defectuosa puede causar una pérdida significativa de potencia, especialmente bajo cargas pesadas o durante la aceleración.
Dificultad para arrancar: El automóvil puede tener problemas para arrancar o no arrancar en absoluto, ya que la bobina de encendido es esencial para generar la chispa necesaria para encender la mezcla de aire y combustible en el motor.
Luz de verificación del motor: una bobina de encendido que no funciona correctamente puede activar la luz de verificación del motor en el tablero. Esta luz indica que la unidad de control del motor (ECU) ha detectado un problema que necesita atención.
Calado: El motor puede calarse mientras está en ralentí o conduciendo, lo que puede ser peligroso e inconveniente.
Petardeo: Una sincronización inadecuada del encendido debido a una bobina de encendido defectuosa puede causar petardeo, donde el combustible no quemado se enciende en el sistema de escape.
Daños al convertidor catalítico: Los fallos de encendido repetidos y el combustible no quemado pueden provocar sobrecalentamiento y daños al convertidor catalítico, que es un componente costoso de reemplazar.
Aumento de emisiones: una bobina de encendido defectuosa puede causar una combustión incompleta, lo que genera niveles más altos de hidrocarburos no quemados y otros contaminantes en el escape.